TEXTO H.E.G.


Tengamos en cuenta que, según Schelling, si Dios a creado el mundo de la nada parte de esa nada nos persigue. La nada está sobre nosotros y es un abismo tentador.

Aquello que llamamos conocimiento, hoy aparece ante todo como un verdadero culto a la imagen. y esta no es sino la organización de una realidad a nuestra medida, nuestra propia nada.

La ciencia no retorna al paraíso, pero nos hace dependientes de la tecnología. Lo malvado de la ilusión cientificista radica en que no libera de los defectos humanos pues estos son interiores, pertenecen al alma. Un nuevo Edén no necesitaría computadoras ni televisión.

El mal verdadero es espiritual, implica una tentativa de un orden en el caos.

Crear una nueva realidad para los seres humanos como insinúa la llamada realidad virtual, que sin duda apunta a llenar el abismo de la nada pero está condenada a buscar de manera continua nuevos objetos y formas de placer, porque su naturaleza sistémica radica en reproducirse como deseo.